Grosor del colchón: ¿qué grosor debe tener y por qué?
Última revisión: Abril, 2024
Dormir es natural, pero ya no es ningún secreto que dormir no es sinónimo de descanso. Entonces, ¿estamos seguros de que nuestro sueño es realmente reparador? Muchas veces sucede despertarse más cansado que la noche anterior y los motivos pueden ser muchos y muy diferentes entre sí. Uno de los principales culpables de las alteraciones del sueño es el colchón.
Hay varios factores que influyen en el descanso, algunos de los cuales son difíciles de cambiar: desde los pensamientos a las preocupaciones, pasando por la salud y la calidad del sistema de camas. Este último puede mejorarse comprando componentes válidos y adecuados a las necesidades de quienes lo utilizarán.
El colchón es sin duda el protagonista indiscutible del sistema de camas y muchas veces es el que se sustituye cuando no se descansa bien o lo suficiente. Sin embargo, cambiar el colchón presupone la compra de un producto adecuado a sus necesidades, para poder solucionar los problemas que no le permiten disfrutar de un sueño de calidad.
Grosor del colchón: por qué es importante y cómo afecta el sueño
Elegir el colchón perfecto no es tan sencillo, ya que hay varias variables a tener en cuenta para entender qué características debe tener el producto para definirlo como el adecuado para nosotros. Pero no te preocupes, solo un poco de paciencia es suficiente.
Cada colchón muestra cualidades y características que deben ser evaluadas por el cliente: una de las más importantes se refiere al grosor del colchón. Este es un aspecto fundamental a tener en cuenta, ya que la capacidad de soporte del colchón depende del grosor.
Un colchón capaz de proporcionar un soporte adecuado al cuerpo será sin duda un colchón cómodo y excelente para mantener una posición correcta durante la fase de conciliación del sueño y durante todo el sueño. El objetivo, de hecho, es permitir que la columna adopte una posición natural incluso durante las horas de descanso, para evitar molestias y dolores desagradables al despertar.
El grosor del colchón depende del tipo de material que se utiliza para hacer el propio colchón. A modo indicativo, la media de un colchón viscoelástico es de unos 20 – 25 cm, mientras que un colchón de muelles también puede tener una altura de unos 25 – 30 cm.
Lo que diferencia los diferentes grosores está relacionado con la cantidad de material presente en el interior: cuanto más material haya, más podrá el colchón proporcionar un alto soporte, garantizando comodidad y bienestar.
Grosor del colchón: cómo evaluarlo y qué colchón elegir
Una vez que entendemos la importancia del grosor del colchón, es fundamental entender qué tipo es el adecuado para nosotros, o el que mejor se adapta a nuestras necesidades. No existe el grosor perfecto, porque cada individuo encuentra la comodidad en diferentes aspectos y características, pero generalmente los colchones más gruesos se encuentran entre los más populares, así como los que obtienen mejores comentarios de quienes los han probado, incluso a largo plazo.
Por tanto, la elección del colchón debe tener en cuenta su grosor, ya que de él depende todo el apoyo que recibe el cuerpo durante el sueño, lo que se traduce en un descanso realmente relajante.
Grosor del colchón: ¿qué pasa si descansas en un colchón demasiado bajo?
Cuando el colchón sobre el que te acuestas es demasiado bajo, se percibe de inmediato. Una vez tumbado, la base y las lamas se pueden sentir a través del colchón, señal de que se trata de una superficie inadecuada para un descanso eficaz. Es posible que muchos no sientan la incomodidad de un colchón delgado, pero el sueño se resiente y, en consecuencia, todo el día.
Cuando el soporte que brinda el colchón no es suficiente, lo primero que sucede es que el cuerpo no siempre es capaz de asumir la posición correcta, con el riesgo de sobrecargar los músculos y el esqueleto, lo que lleva a la aparición de diversos problemas físicos que tienden día a día a empeorar si no se toman medidas sobre el colchón.
Grosor del colchón: cuando se recomienda un colchón menos grueso
Como siempre hay excepciones. Existen colchones más finos y en algunos casos son los preferidos, tratando siempre de encontrar productos de buena calidad.
Los colchones más finos son perfectos para camas de camping (tanto para adultos como para niños) y para algunos modelos de sofás cama. Son colchones fáciles de transportar y cómodos de enrollar, para ahorrar espacio y no sobrecargar demasiado los hombros y la espalda de los que tendrán que moverlos.
Las ventajas de elegir colchones más finos radican precisamente en su practicidad y manejabilidad, así como en la extrema facilidad de limpieza e higiene. He aquí, por tanto, que en algunos casos es incluso recomendable comprar un colchón con un grosor reducido, con el fin de obtener una serie de beneficios imposibles de encontrar eligiendo colchones de mayor altura.
El secreto para elegir el colchón perfecto es siempre entender las necesidades de quien lo utilizará, porque solo así podrás hacer la mejor elección y sin remordimientos.
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